MELIÁ VARADERO

A este hotel le guardo un cariño especial, y es que aquí pasé las mejores vacaciones de mi vida, pero eso no quita para que mantenga mi línea de objetividad eh 😉

Que es un hotelazo está claro, aunque se han subido a la parra con el precio en estos últimos años. Es un 5* lujo al que tan sólo se le puede sacar un fallo que contra todo pronóstico es la playa, toda una excepción en Varadero. Lo que sucede es que el hotel está sobre un pequeño acantilado y para acceder a la playa hay que bajar unas escaleras, algo que es un pelín incómodo sobre todo para gente mayor.

Justo esta zona de playa es rocosa, pero cuanto más se avanza hacia la izquierda más despejado está hasta llegar a la parte de arena fina, que es justo donde acaba la playa de este hotel. Recuerdo que venían las animadoras a advertirnos cuando nos íbamos tanto a la izquierda que pasábamos a la playa del hotel Meliá Las Américas, pero no pasaba nada, como la playa estaba mejor nos quedábamos y no había ningún problema. (En el vídeo, cuando sale la playa, no es la del Meliá Varadero, está demasiado a la izquierda… que no, que no nos la cuelan. En cuanto haya presupuesto iré a grabar los vídeos propios para verdaderocaribe.com, prometido).

De todos modos, ya sabréis a estas alturas que cerca de roca es donde mejor se puede practicar el snorkel, así que sólo hay que buscar el lado positivo.

Esto también implica que sobre el acantilado en el que está el hotel, quedan unas vistas espectaculares al mar.

Y tras este “fallo”, pues vamos con lo bueno, que es todo lo demás.

Empiezo por la gastronomía. El buffet principal es de variedad total, y eso que estamos en Cuba. Carne de todo tipo, también de res, chuletillas de cordero, pizzas preparadas al momento, marisco, y todo lo que se le exige a un resort de primer nivel.

En el buffet, el cliente elige la pieza de carne o pescado para que se la preparen al momento.

Los temáticos son excelentes y además cuenta con snack bar en el que preparan al momento hamburguesas, sándwiches y platos similares las 24 horas del día.
Para comer dispone de 3 rincones además del buffet, que son el restaurante ubicado en la playa y cuya especialidad es el grill, el ranchón cercano a la piscina que ofrece comida criolla y el Rincón de la Paella en el que como os imagináis sólo preparan paellas que por cierto no son nada del otro mundo.

Los restaurantes temáticos de las cenas son steak house, japonés, mexicano y uno especializado en pescados y mariscos. Vamos que para todos los gustos a la hora que sea…

La piscina es el lugar en el que transcurre la mayor parte del día. Hay actividades y se montan partidos de volley todos los días. Cuenta con bar en el que por cierto no hay barra directa a la piscina sino que hay que salir al interior para pedir a pesar de que los taburetes sí estén dentro del agua.

El lobby es muy elegante, con plantas colgantes y un lago artificial que dan sensación de frescor. En el lobby bar por la noche suele haber una pianista amenizando la toma de cócteles previa a la cena.

Las habitaciones son amplias y bien equipadas. Sobre la limpieza están impecables, al igual que el resto del hotel. Recientemente han sido reformadas, así que si están todavía mejor que cuando fui yo pues no me quiero ni imaginar…

Cuenta con un servicio especial para los más exigentes, “The Level” que cuesta 25CUC por persona y día y que ofrece un servicio extra de camarero exclusivo, y WIFI permanente en la habitación.

La animación que disfruté en este hotel no la he vuelto a conocer en ningún otro hotel en mi vida. Los más jóvenes os haréis amigos de todos, y las experiencias que pasaréis juntos os las llevaréis como el mejor recuerdo. El animador más destacado, Félix, es el que controla todo lo que pasa en el hotel y en Varadero, y os aconsejará en cualquier tema. Lleva un montón de años, y ojalá lo lleguéis a conocer.

Luego hay juegos y deportes en la playa, en la piscina, clases de baile (y algún concurso), tiro con carabina, baloncesto,… Y por la noche por supuesto shows.

Se lo recomendaría a gente joven, y parejas. Para gente mayor hay hoteles con la playa más cómoda, aunque aun así no les defraudará. No lo he dicho, pero la localización no es buena para salir mucho por el pueblo y las discotecas. Recuerdo que nos organizábamos con otros clientes para compartir taxis, pero claro, la vuelta la hacías sólo…