BLUE BAY GRAND ESMERALDA

BLUE BAY GRAND ESMERALDA

• CATEGORÍA
• PLAYAS
• PISCINAS
• GASTRONOMÍA
• HABITACIONES
• ANIMACIÓN

Calificación 6.8

PRECIO
Unos 900€ la semana en todo incluído

Este hotel claro está que no es de los mejores de la zona, ni el que mejores instalaciones tenga. Lo que sí está claro es que es una opción muy buena para quienes quieran conocer la región o Playa del Carmen de manera barata, sobre todo si son jóvenes y tienen poca experiencia en este tipo de resorts. También está de lujo para salir de fiesta por Cancún, que desde aquí está relativamente cerca.

Lo podemos clasificar como de tamaño medio entre todos los que os enseño en Riviera Maya. Está un poquito al Norte de Playa del Carmen, más cerca del aeropuerto pero relativamente lejos de la mayoría de excursiones, ubicadas al Sur.

Aunque el hotel no sea tan grande, dispone de trenecitos para moverse por sus distintas áreas, pero vamos que dudo que lleguéis a usarlo salvo que os toque alojaros en la parte de atrás.

Para ir desde el hotel a la carretera donde se cogen las van, hay que ir caminando unos 8 minutos (a menos que prefiráis el taxi), y a ciertas horas de sol pues como que se hace duro, pero bueno, no es que sea algo tan grave.

El diseño y la estructura son más modernos que en otros resorts de Riviera Maya, y esto es algo que a unos gusta y a otros no tanto. Digamos que combina elementos autóctonos como palapas, y demás, con edificios de estilo más occidental.

Las zonas de paso son similares a las de estos resorts de Riviera Maya. Jardines, flora y fauna autóctona, pasillos larguísimos y un montón de sombra de la que se agradece.

Hay dos secciones bien diferenciadas en las que se encuentran las habitaciones. Una en primera línea de playa y otra más hacia el interior. Desde esta última parte hay que andar unos 500m. hasta la playa o ir en cochecito. Se ve genial en el MAPA que os he puesto arriba.

Antes de ir, mandadles un mail y pedid que os alojen cerca de la playa, que aunque no sea mucha distancia, si se hace todos los días varias veces pues se nota. El “no” ya lo tenéis…

Y ya que hablamos de donde sale mejor alojarse, empiezo a hablar de las habitaciones ¿no?

Además de las habitaciones standard, también tendremos la posibilidad de alojarnos en habitaciones superiores con pequeños lujos como el jacuzzi en la terraza, e incluso con piscinita privada.

Os comento sobre las más básicas que son en las que nos alojamos la mayoría. Son grandes, muy grandes, con unas camas enormes. El baño es correcto, no tan espectacular como en otros hoteles, pero está bien. La decoración es bastante clásica, la verdad, con sillas y cabeceras de madera viejita, pero bueno, en el Caribe se lleva bastante ese estilo. Todas las habitaciones cuentan con minibar.

El hotel es peculiar en un aspecto. No se lleva pulsera, lo cual gusta mucho a algunas personas a quienes les molesta un plástico en la muñeca. Se conoce que piensan que si estás por ahí es porque eres cliente, pero vamos… que ellos sabrán como controlan al personal.

Sobre la playa os diré que no vengáis a este hotel si esperáis una playa de calidad. La erosión ha machacado a este hotel y la zona de baño en la costa se limita a una franja de aproximadamente la tercera parte del frente total de playa del hotel, que es la zona donde está la piscina.

De todos modos es más que suficiente para bañarse, el resto es un escalón con unos sacos horrorosos, que dificulta bastante el acceso al agua y afea el paisaje.

El truquito de este hotel está en que caminando hacia la izquierda mirando el mar, se encuentra una zona más virgen de playa en la que se puede estar muy a gusto. Y andando un poquito más, está una zona que se asemeja a una laguna en la que el agua del manglar se junta con el mar y el baño es una gozada.

Para daros un garbeo, así veis cómo se llega de fácil:

Por lo menos el bar de la playa está bastante bien, con columpios en la barra y todo.

La piscina eso sí, cumple con todos los requisitos de piscina tropical de resort todo incluído. Con las hamacas dentro de la piscina, el bar y diferentes zonas para aerobic, deportes y demás. Lo que más me llama la atención es que tiene bicicletas sumergidas para hacer spinning en la piscina, sorprende eh?.

En la piscina destaca el servicio. Los camareros cuando no tengan mucha carga de trabajo se acercarán a traernos las copas, todo un detalle sobre todo en hoteles tan económicos.

En el edificio de habitaciones de la parte más lejana a la playa, también hay una piscina, pero es más pequeña y sin tanta vida y animación como la grande.

El WIFI es gratuito para un dispositivo por habitación (No te hagas ilusiones, será el de tu mujer) algo exclusivo la verdad, y el otro o los otros aparatos tienen que pagar unos 2€ al día por ello.

En el apartado gastronómico nos encontramos con 7 restaurantes temáticos además de los buffet. En algunos de los restaurantes a la carta hay que hacer cola en época de alta ocupación, pero es que el número de cenas que podremos disfrutar es ilimitado, aunque los mejores son el francés y el italiano.

Los buffets son como en el resto de hoteles, comida muy variada y cocineros preparando diferentes platos al momento.

El Sport Bar está abierto las 24 horas del día, y es el punto en el que tomar un tentempié cuando se precise.

Otro punto destacado del hotel, es el bar interior Black&White.

La animación es normalita. Hay juegos, deportes y actividades durante el día que se acompañan de shows tanto diurnos (en la piscina) como nocturnos en el teatro. Lo que sí está claro es que si queréis fiesta tenéis que ir sí o sí a Playa del Carmen, o incluso a Cancún, que no está nada lejos.

Entre otras comodidades, dispone de miniclub para los niños y gimnasio.

Recomendaría este hotel a quienes quieran conocer la zona en plan aventura y sin gastarse mucho dinero. La verdad es que tanto para parejas, como para familias, como para grupos o personas mayores, recomendaría antes que éste otros hoteles.